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Los mejores placeres de la vida, son aquellos momentos que se disfrutan con sencillez. Los obsequios de un cumpleaños, digno de envidia, una botella de vino y la propuesta de un maratón por parte de mis amigos y familia son dignos de la máxima gratitud. Ya solo falta beberme la botella y correr el Maratón de París, las dos cosas sencillas y al alcance de mi mano me propongo cumplirlas. Gracias a todos, no merezco tanto.

Manolo,

Octubre 2.010

Tras mas de 30 años rodando por el asfalto, considerábamos que a nuestro padre le faltaba poner la guinda a su longeva carrera de corredor y que mejor ocasión que apuntarnos con todo el grupo al Maratón de París y regalarle el dorsal por su cumpleaños.

Ahora le toca disfrutarlo en cada momento que entrene y mucho mas en la carrera

Borja y Nacho

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Y nada mejor que un Fondillón reserva especial 1964 para que en cada sorbo saboree ese magnífico momento que está por llegar Maratón París 2011, esa ha sido la contribución de A TO TRAPO a la guinda de los hijos.

A to trapo