Laderas del Machu Picchu1

Las huellas húmedas de sus pies descalzos iban dejando por el aire un aroma que, como el canto de las sirenas enloquecía a Ulises, me forzaba a seguir el sensual zigzagueo de su culo, ostensible a través de la falda sudada y pegada a sus  delicadas y turgentes nalgas. Su atracción era irresistible. Como un perro en celo mi apetito se acrecentaba según me iba aproximando al objeto de deseo. Si su solo meneo era una incitación incontrolable, la contemplación del  rostro en uno de sus alegres giros, fue ya un hechizo. Afrodita quisiera par sí sus atractivos. Ni la fría blancura de las valkirias del norte ni el negror invisible de las tribus abisinias. Un cálido atezado,  no sé si cruce de   blanco y de negra o de indio y de blanca o de mestizos, tal es la variedad de posibilidades…

Una morenaza de hombros contorneados, ojos escondidos tras la cortina del cabello negro como el azabache, expresivos, sugerentes, absorbentes. Mi atención se centra en ellos, es lo único que veo. Ha desaparecido la montaña, han desaparecido las murallas, las llamas, la vegetación, solo sus ojos tras su cabellera movida por la brisa, solo ella, inalcanzable. El eco de su risa me perfora los oídos, su mirada me aturde, sus movimientos, no sé si juega o huye de mis pasos, me incitan a seguirla.

Laderas del Machu Picchu. No existe el tiempo en aquel espacio tan limpio, donde solo las huellas de piedra de seres que nos precedieron en aquellas altitudes, casi rozando el cielo, por encima de las nubes, apenas el oxígeno imprescindible, el pellejo sobre los huesos, imperceptible el paso del tiempo y, aun así, el deseo, siempre el deseo que prolonga el sufrimiento de la especie por el goce. Bajando de aquellas laderas tropecé con ella, una pared vegetal le corta el paso. Se gira frente a mí que la sigo a poca distancia. Una chola,  que dicen, y se me encaró como un gato acorralado:

–Tío, ¿cómo se te ocurre venir a babearme si tu espada flamígera hace ya tiempo que perdió el temple? Eres demasiado viejo. Regresa a la montaña,  encomiéndate a los dioses con los que bien pronto te vas a reunir y déjame a mí gozar mi juventud.

–Qué cosas tiene la vida, pensé yo.

Con la agilidad de una gacela, riendo como una hiena, se esfumó entre la muralla vegetal.

¿Tendría razón aquella joven salvaje, desconocedora, sin duda, de las correrías de Gilgamesh huyendo de la muerte, de los viajes de Ulises hasta llegar a los brazos de Penélope en Ítaca o de los pactos de Fausto en busca de la eterna juventud?

¿Qué sabría ella de todo eso?

¿Qué sabría ella de las viejas cenizas apagadas que, removidas por el viento de la pasión, atizan la hoguera adormecida por el paso del tiempo?

San Juan, 4 de abril de 2018.
José Luis Simón Cámara.

1 Andanzas de mi amigo Andrés Basso Romero de Hoyos alias Pinki, viajero infatigable en busca del brebaje de la mocedad prolongada, sea cuerno de rinoceronte, leche de llama, uña de oso polar o diente de cóndor.

II Medio Maratón Dama Guardamar del Segura (18-Marzo-2018)

Buscando opciones para correr una carrera cercana para ponerme un objetivo y así seguir mis entrenamientos con más motivación, la media maratón de Guardamar del Segura apareció en el mapa. ¿Y por qué no una carrera en honor a una Dama milenaria? Además, según se comentaba, la organización se volcaba en mimar a los corredores. Así que preparados y listos para salir un domingo soleado, aunque con algo de viento. Mis expectativas: correr a gusto y disfrutar, nada más.

El ambiente muy alegre, y el recorrido nos lleva por el centro del pueblo, nos acerca a la playa y luego por los pinares de las dunas. El circuito no es llano, más bien sorprende con unas cuestecitas interesantes. Ante todo, se agradece que la gente nos va animando durante toda la carrera. Dos vueltas hay que dar – la primera de descubrimiento, y en la segunda ya podemos reconocer los diferentes tramos e ir tachando los kilómetros para la meta.

Disfruto en todo el recorrido. Los kilómetros van cayendo y a mi gran sorpresa, llego a esa última recta final – después de la última cuestecita – en un tiempo que no me había esperado. Hay pódium para Pili, Naiara y para mí – y como no puede ser de otra manera: el trofeo 🏆 representa la Dama de Guardamar. Y efectivamente, excelente organización de la carrera, antes (una bolsa de corredor bien repleta), durante (buena organización, gente animando) y después de la carrera (un arroz estupendo para reponer fuerzas).

Un test y buena dosis de motivación cara a la preparación de la maratón de Edimburgo que nos espera a finales de mayo. – Aun me quedan unas 9 semanas de preparación “Plan Pili” (muchas 🙏 gracias) hasta salir a por un nuevo reto de 42km

Enlaces sobre esta prueba

Nombre Categoría Tiempo Puesto General Puesto Categoría
Julián VETERANOS C 1:31:33 138 17
Pili VETERANAS C 1:31:42 142 1
Jorge Juan VETERANOS C 1:35:15 198 29
Juan P. VETERANOS B 1:35:41 205 56
Naiara VETERANAS B 1:35:41 206 3
Ernesto VETERANOS C 1:47:22 454 79
Martina VETERANAS E 1:53:34 581 2